NOTICIAS DE PREVENCIÓN

31-01-2018
Viví un verano saludable!
El verano trae sol, altas temperaturas, vacaciones y puede que adoptemos hábitos que descuiden nuestra salud. Conocé acá cuáles son las principales recomendaciones para disfrutarlo saludablemente.

Cuidado con los golpes de calor!

Durante esta época estamos más propensos a sufrir un golpe de calor, que es el aumento de la temperatura del cuerpo, lo que conlleva a la pérdida de agua y sales esenciales para su funcionamiento. Cualquier persona puede sufrir un golpe de calor, pero debemos tener especial cuidado con los bebés y niños, embarazadas, personas con enfermedades crónicas y personas mayores.

Los principales síntomas son: sed intensa, temperatura mayor a 39º C, sudor excesivo, agotamiento, cansancio o debilidad, agitación y dolores de estómago, náuseas o vómitos.

Tené en cuenta! no exponerte al sol entre las 10 y las 16 horas, protegerte usando protector solar y gorro, sombrero o una sombrilla, usar ropa liviana, tomar mucha agua durante todo el día, cuidar los horarios y la intensidad a la hora de realizar actividad física.

Cuidá tu alimentación

  Si bien durante todo el año es importante llevar una alimentación equilibrada, lo que debemos tener en cuenta en verano es que por las altas temperaturas aumentan las pérdidas de líquidos en nuestro cuerpo y tenemos mayores posibilidades de deshidratarnos. Esto hace que sea necesario tomar más agua y priorizar alimentos frescos y naturales como frutas y verduras, que nos aportan vitaminas, minerales, fibra y agua que nos ayuda a mantenernos hidratados.

Lo recomendado es incorporar diariamente cinco porciones de frutas y verduras combinadas con el resto de los alimentos. También es preferible comerlas crudas, ya que esto hace que sus nutrientes se conserven mejor, además, el verano es una época que favorece el consumo de preparaciones más frescas y livianas debido al intenso calor.

¡No te desordenes! Aunque es normal relajarse un poco en vacaciones, se aconseja realizar las cuatro comidas principales (desayuno, almuerzo, merienda y cena), incluir una o dos colaciones y respetar los horarios para controlar el apetito.

El agua: la mejor opción

Lo ideal es tener siempre una botella de agua cerca y consumir por lo menos 2 litros por día, aumentando la cantidad los días de mucho calor. No hay que esperar sentir la sensación de sed, ya que éste es un síntoma de falta de agua. Además es importante hidratarte antes, durante y después de realizar actividad física, durante las comidas y evitar las bebidas alcohólicas.

¿Te vas de viaje? Si tenés dudas sobre la seguridad del agua de la ciudad donde estás vacacionando, es mejor que la hiervas durante cinco minutos o que le agregues dos gotas de lavandina por litro de agua y la dejes reposar 30 minutos antes de consumirla.

Protegete del sol

Durante el verano, los rayos ultravioletas aumentan, además nos exponemos más al sol por usar menor cantidad de ropa y pasar más tiempo al aire libre, parques, piletas y playa. Entonces, es importante tener algunos cuidados para evitar los daños que sufre nuestro cuerpo a causa del sol como: arrugas, quemaduras, envejecimiento de la piel, cataratas e incluso cáncer de piel.

En primer lugar, se aconseja evitar la exposición entre las 10 y las 16 horas, ni siquiera con protector solar. En cuanto a los protectores solares, deben usarse con factor de protección de por lo menos 30, colocárselo de 30 a 45 minutos antes de exponerse al sol y repetirlo cada dos o tres horas. También es importante no dejarlo mucho tiempo en el sol ni destapado, y chequear siempre su fecha de vencimiento.

Los niños menores de 6 meses no deben exponerse al sol y los menores de 1 año, si bien pueden utilizar protector solar para alguna exposición solar ocasional, no es recomendable. En estos casos, deben utilizar formulaciones para niños que tengan más filtros físicos que químicos, porque son más seguros.

También cuidá tus ojos! La exposición excesiva al sol puede relacionarse con problemas visuales como: cataratas, pterigion, fotoqueratitis y cambios degenerativos en la córnea. Las principales recomendaciones son: evitar estar en sol entre las 12 y las 16 horas, usar lentes con protección solar y gorros o sombreros.

Otros consejos:

- Llevá repelente de insectos si vas a estar en parques y jardines, especialmente durante el atardecer y la noche.

- Si vas a una pileta de natación, se recomienda que uses ojotas u otros calzados de goma al caminar cerca, para evitar resbalones y caídas.

 

Profesionales consultados:

Lic. en Nutrición Florencia Perezlindo (MP 1243)

Médica Dermatóloga María José Benet (MP 4903 - RE 01305451)