La semana conmemorativa, que este año se celebra entre los días 19 al 25 de mayo, se realiza desde el año 2004 a partir de una iniciativa de la Asociación Francesa por el Parto Respetado.
La misma tiene como objetivo devolverle a la mujer y a la familia el papel activo respecto al cuidado del embarazo y el recién nacido, empoderando a los padres e impulsando el respeto de sus derechos durante el embarazo, el parto y el puerperio.
El término "parto respetado" o "parto humanizado" hace referencia a una modalidad de atención del parto caracterizada por el respeto a los derechos de los padres y los niños y niñas en el momento del nacimiento. Es decir, en consonancia con las necesidades y deseos de la familia que va a dar a luz.
Cuando se habla de parto humanizado, se habla de generar un espacio familiar donde la mamá y su bebé sean los protagonistas y donde el nacimiento se desarrolle de la manera más natural posible.
En ese sentido, en Argentina, la Ley de Parto Humanizado Nº 25.929, aprobada el 26 de agosto de 2004, promueve que se respete a la familia en sus particularidades –raza, religión, nacionalidad- y que se la acompañe en la toma de decisiones seguras e informadas durante el embarazo, el trabajo de parto, el parto y el postparto.
La madre tiene derecho:
Toda persona recién nacida tiene derecho:
El padre y la madre de la persona recién nacida en situación de riesgo tienen los siguientes derechos:
¿Cómo sabemos si un parto es respetado?
Un parto es respetado si se cumplen las siguientes condiciones:
- La mujer debe ser informada sobre las intervenciones médicas que pudieran tener lugar durante el proceso de parto, de manera que pueda optar libremente en caso de que existan diferentes alternativas.
- Debe ser tratada de modo individual y personalizado, en consideración con sus pautas culturales.
- La embarazada no está enferma. Debe ser considerada como persona sana, de modo que se facilite su participación como protagonista de su propio parto.
- Tiene derecho al parto natural, respetuoso de los tiempos biológicos y psicológicos, evitando prácticas invasivas y suministro de medicación si no es estrictamente necesario.
- Debe ser informada sobre la evolución del parto y el estado de salud de su hijo o hija.
- Es aconsejable y necesario que esté acompañada por una persona de confianza durante el trabajo de parto, el parto y postparto.
- Debe tener a su lado al bebé durante la permanencia en el establecimiento sanitario, siempre que el recién nacido no requiera de cuidados especiales.
Más información:
Vamos a crecer. Sitio web del Ministerio de Salud sobre cuidados para mujeres embarazadas, niños, niñas y adolescentes.
http://www.msal.gov.ar/vamosacrecer/
Ley Nacional 25.929 – Ley de Parto Humanizado
Maternidad segura y centrada en la familia.