NOTICIAS DE PREVENCIÓN

17-12-2014
OBESIDAD Y SOBREPESO: factores de riesgo para el cáncer
Una investigación de la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC) demuestra que la obesidad y el sobrepeso representan factores de riesgos para el cáncer.

El estudio realizado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), muestra que la obesidad y el sobrepeso provocan medio millón de casos de cáncer al año.

La OMS define al sobrepeso y a la obesidad como una “acumulación anormal o excesiva de grasa en el organismo que puede ser perjudicial para la salud”.

Esta enfermedad se da a nivel mundial y es atribuible, principalmente, a una mala alimentación debido al exceso de alimentos pobres en fibras, vitaminas y otros micronutrientes. Además, se relaciona con un estilo de vida sedentario, muchas veces gracias al trajín cotidiano que no da lugar al tiempo necesario para realizar alguna actividad física.

Una forma de medir la obesidad es a través del índice de masa muscular (IMC) que representa la relación entre el peso y la talla. Éste se calcula dividiendo el peso de la persona en kilogramos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m2). Si da un IMC igual o superior a 25 determina sobrepeso, e igual o superior a 30 determina obesidad.

El cáncer, por su parte, es provocado por diversos factores y representa una de las principales causas de mortalidad en el mundo. Según la OMS, la dieta representa el segundo factor, después del tabaco, como una causa teóricamente prevenible de cáncer. La investigación de la IARC sugiere que numerosos casos de cáncer se evitarían si la persona tuviera un cuerpo saludable y un índice de masa muscular menor a 25.

Un IMC elevado es un factor de riesgo para el cáncer de esófago, colon, recto, riñón, páncreas, vesícula biliar, mama posmenopáusico, ovario y endometrio. Sin embargo, también lo es para otras enfermedades no transmisibles, como diabetes, enfermedades cardiovasculares y de transtornos del aparato locomotor.

Por estas razones, es importante saber que la obesidad se puede prevenir, e incluso combatir, a través de la adopción de un nuevo estilo de vida teniendo en cuenta las siguientes recomendaciones:

-Evitar alimentos hipercalóricos ricos en grasas y azúcares.

-Limitar la ingesta de bebidas alcohólicas.

-Evitar el uso de sal.

-Incorporar alimentos saludables como frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.

-Realizar actividad física periódicamente.

Tener un cuerpo activo es muy importante, puede realizarse actividad ya sea en un gimnasio o haciendo caminatas al aire libre. Incluso si no se tiene tiempo se aconseja sacar provecho de los desplazamientos diarios como subir escaleras o caminar al trabajo. Es decir que, para combatir la obesidad y el sobrepeso, es necesario buscar un equilibrio entre las calorías consumidas y las calorías gastadas.

La fuerte correlación entre la obesidad y el cáncer lleva a pensar que el cambio es posible sólo si tomamos conciencia y nos comprometemos en cuidar nuestra salud, a través de una dieta diversificada y nutritiva, desde los primeros años de vida.

Más información:

-OMS - Organización Mundial de la Salud: http://www.who.int/es/

-Ministerio de Salud: http://www.msal.gov.ar/